Español coloquial Flashcards
Tío / tía
Tío es una forma coloquial, muy informal, que usamos en España para dirigirnos a un amigo o alguien que conocemos muy bien. Podemos decir, por ejemplo:
-Oye, tío, ¿a qué hora quedamos mañana?
También podemos usar tío (o tía) para hacer referencia (de una manera muy informal) a una persona desconocida o que no conocemos muy bien. Por ejemplo, podemos decir:
“Esta mañana he visto a un tío por la calle que llevaba un sombrero muy raro”.
Pasarse
En un contexto muy coloquial podemos usar el verbo pasarse para expresar que alguien ha hecho algo mal, muy mal, exageradamente mal, que ha sobrepasado ciertos límites morales o éticos.
Por ejemplo, si un profesor se burla de los errores de uno de sus estudiantes, alguien, otro profesor u otro estudiante le puede decir: “perdone, profesor, pero usted se ha pasado”, es decir, lo que usted ha hecho, profesor, está mal, está muy mal: ha sobrepasado los límites de lo que está permitido.
pasarse tres pueblos.
El significado es el mismo como pasarse,pero decir “tres pueblos”, “te has pasado tres pueblos” añade énfasis.
Cuando le decimos a alguien, “oye, te has pasado tres pueblos”, le estamos diciendo, oye, chico, eso que has dicho o eso que has hecho está muy mal, es desproporcionado: “Te has pasado, te has pasado tres pueblos”.
Es que
Usamos ES QUE para introducir una aclaración o para dar una explicación que nadie nos ha pedido directamente.
Por ejemplo, un estudiante en clase de español puede pedirle a su compañero un bolígrafo.
“Perdona, ¿me puedes dejar un bolígrafo? Es que me he olvidado mi bolígrafo en casa”.
O si llegamos tarde a una cita, podemos decir: “Perdona por llegar tarde, pero es que he perdido el tren”.
A ver
A ver es una alternativa de IR A VER, es decir, en lugar de decir ir a ver, decimos simplemente a ver.
Por ejemplo, una madre, en lugar de decir “voy a ver si mi hija ha terminado ya de hacer los deberes de la escuela”, puede decir: “¡A ver si mi hija ha terminado ya de hacer los deberes!”
Otro ejemplo: si en tu cumpleaños alguien te da un regalo, tú, mientras lo abres, puedes decir “¡A ver, a ver qué es!” Es decir, lo que estás diciendo es “voy a ver qué es, voy a abrir el regalo y voy a ver qué es”, pero usando A VER estás expresando una mayor emoción, una mayor ilusión por saber qué regalo te han hecho. Estás diciendo a la otra persona que estás muy ilusionado.
En estos casos, A VER es una forma coloquial de “voy a ver” y se usa para dar más emoción a lo que se está diciendo.
Vale
Se usa para dar aprobación sobre algo, para mostrar acuerdo, para decir que algo nos parece bien. A veces se usa simplemente para indicar que hemos entendido lo que nos están diciendo, que hemos comprendido.
También se puede usar para pedir confirmación a otra persona, para preguntar si la otra persona está de acuerdo con nosotros, si le parece bien lo que decimos o simplemente si nos ha escuchado.
A veces los españoles usamos la palabra “vale” como una muletilla.
Las “muletillas” son palabras que se repiten con frecuencia, pero que no tienen un significado concreto en las frases. El significado de la frase no cambia. Es decir, se podría decir la misma frase sin la muletilla y la frase tendría el mismo significado.
. ¡Vaya!
Vaya puede usarse como una exclamación para expresar sorpresa por algo:
• ¡vaya, tú por aquí! No te esperaba.
• ¡vaya, ahora se ha terminado la leche y no puedo tomar café!
Se puede usar también delante de un nombre, para expresar un sentimiento positivo o negativo hacia algo (un objeto, una persona, un evento, un hecho, etc.), dependiendo del contexto. Por ejemplo, si un amigo se compra un coche nuevo podemos decir: “¡vaya coche que te has comprado!” En este caso, cuando se usa con un nombre, en lugar de vaya podemos usar que:
“¡Qué película!” “¡Qué libro!” “¡Qué coche!” “¡Qué golpe!” etc.
¡Vaya con
un uso más avanzado de Vaya es su uso con la preposición CON:
“¡Vaya con los vecinos! ¡vaya con el niño! ¡vaya con tu profesor! ¡vaya con la película ! ¡Vaya con el libro!”
Normalmente en estos casos se usa esta expresión con cierta ironía y con carácter más bien negativo:
“¡Vaya con el niño! Hasta que no ha roto el vaso con la pelota no ha parado”.
“¡Vaya con los vecinos! Todos los días tienen la música altísima por las noches”.
Hostia – hostias
Dos significados más importantes de la palabra hostia:
1. comounainterjecciónparaexpresarsorpresa.
Por ejemplo, si te encuentras con alguien por casualidad, de forma totalmente inesperada, puedes decir “¡Hostias! ¿Qué haces tú aquí? No te esperaba verte”.
- Hostia también puede referirse a un golpe fuerte.
Puede ser un golpe por accidente:
“Ayer me di una hostia con la bicicleta”.
Joder
- Se puede usar como sinónimo de molestar, de fastidiar, de hacer algo que provoca malestar en otra persona. Por ejemplo, “los niños de mis vecinos siempre están jodiendo con la pelota”, es decir, están causando molestias, haciendo ruido, etc. con la pelota, probablemente porque están jugando al fútbol en la calle.
- ¡Joder! también se puede usar como una interjección para expresar sorpresa, enfado, irritación, etc.
Por ejemplo, si tu amigo Carlos no te está prestando atención porque está mirando su móvil mientras tú le hablas, le puedes decir: “¡Joder, Carlos, apaga el teléfono mientras yo te estoy hablando!”. - Otro uso muy común de joder es cuando algo, un plan, un proyecto, por ejemplo, sale mal: “se ha jodido todo”, es decir, todo ha salido mal. También se puede usar cuando una máquina o un objeto se estropea o se rompe: “No puedo ver el partido. Se ha jodido la televisión”.
Jo, Joer, Jope, Jolín, Jolines.
Joder es una palabra muy malsonante en español, es decir, que no se debería usar frecuentemente ya que muchas personas la pueden considerar ofensiva, desagradable y de mala educación. Por este motivo, muchas personas prefieren usar otras palabras que también significan joder, pero son menos ofensivas, como, por ejemplo:
Jo, Joer, Jope, Jolín, Jolines.
Mogollón (un mogollón de)
Mogollón es una palabra que se usa frecuentemente en lugar de mucho, mucha, muchos o muchas. Es decir, expresa una gran cantidad o un gran número.
Por ejemplo, como sustituto de muchos o muchas, podemos decir: “En estos momentos Marta tiene un mogollón de problemas” (en lugar de muchos problemas)
También se puede usar como sustituto de mucho o mucha, por ejemplo: “ayer vi una película que me gustó mogollón” en lugar de “me gustó mucho”.
¡Qué…! (+nombre)
Por ejemplo, podemos decir: ¡Qué fiesta! ¡Qué libro! ¡Qué película! ¡Qué profesor! ¡Qué viaje! etc.
Estas exclamaciones pueden tener un sentido positivo o negativo, todo depende del contexto.
¡Qué +nombre + TAN!
En algunos casos, podemos añadir TAN + ADJETIVO para hacer nuestra opinión más clara, para que no haya dudas de si nuestra opinión es positiva o negativa.
Entonces, por ejemplo, podemos decir:
“¡Qué película tan aburrida! ¡qué comida tan buena! ¡Qué fiesta tan divertida! ¡Qué viaje tan maravilloso!”
¡Qué va!
Esta expresión se usa para decirle a alguien que lo que dice, lo que piensa, no es verdad, que es mentira, que es falso. Por ejemplo, si un amigo te dice, “Oye, tu trabajo en la biblioteca tiene que ser muy aburrido, ¿no?” Tú puedes responder: “¿Aburrido? ¿Mi trabajo en la biblioteca aburrido? ¡Qué va! ¡Qué va hombre! ¡Qué va! Mi trabajo en la biblioteca me encanta. No me aburro nunca”.
¿Entendéis? Se dice ¡QUÉ VA! cuando queremos negar enfáticamente lo que dice otra persona.
Alucinar (estar alucinando o quedarse alucinando)
se usa cuando algo nos sorprende mucho. Se dice “alucinar con” algo o con alguien. Es decir, se usa la preposición con: por ejemplo, “yo estoy alucinando contigo” o “yo alucino con este profesor”.
Mola (me mola algo o algo mola):
se usa de forma informal, de forma coloquial, en lugar de me gusta. Por ejemplo, “esta peli me mola mucho” o simplemente “esta peli mola”.
Mogollón:
es similar a mucho o muchos. Por ejemplo, “aquí hay un mogollón de ruido”, es decir, aquí hay mucho ruido.
Tener buena pinta o tener mala pinta:
es una expresión que se usa cuando algo tiene una buen apariencia. Se suele usar con comida, por ejemplo, “esta tortilla de patatas tiene muy buena pinta”, es decir, parece muy buena, está muy apetecible. Se puede usar también con objetos e incluso con personas: “Ese hombre tiene mala pinta”, es decir, que quizás está mal vestido, o quizás está sucio o tal vez sea alguien peligroso.
Molar
Molar es un sinónimo de gustar o de encantar. Se usa cuando algo o alguien nos gusta mucho. Este verbo sigue la misma estructura de gustar o de encantar, es decir, se dice me mola, te mola, nos mola, le mola…
“A mi madre le mola mucho el fútbol”
También es muy frecuente decir que algo mola, en lugar de me mola. Por ejemplo, en lugar de decir “me gusta o me mola estudiar español”, es muy frecuente decir “el español mola”.
Currar (currante, currárselo)
Currar es un sinónimo de trabajar. Se usa muy frecuentemente en España. Se puede decir, por ejemplo:
- “No puedo salir, tengo que currar mucho”
También se puede decir “curro” en lugar de trabajo:
“Oye, perdona, tengo que irme que llego tarde al curro”, es decir, que llego tarde al trabajo.
Existe también la palabra currante, que quiere decir que alguien es un trabajador, un obrero, alguien que realiza un trabajo normalmente manual.
Chulo, chula
Chulo puede tener un sentido negativo o positivo.
Si hablamos de un objeto o de una situación, entonces tiene un sentido positivo: “este coche es muy chulo; la fiesta de ayer fue muy chula; me gusta mucho tu chaqueta, es muy chula…”
Si hablamos de una persona, entonces normalmente tiene un sentido negativo. Alguien chulo es alguien arrogante, prepotente, agresivo, maleducado.
Cabrearse (estar cabreado, cabrear, cabreo)
Cabrearse quiere decir “enfadarse”, “irritarse”. Se puede decir cabrearse, usando la forma reflexiva del verbo (yo me cabreo, tú te cabreas, él se cabrea, etc) o cabrear (yo cabreo, tú cabreas, él cabrea…).
La diferencia entre cabrearse y cabrear es que si decimos “cabrear” estamos diciendo que hay algo o alguien externo que nos hace estar enfadados, es algo externo lo que causa cómo nos sentimos. Por ejemplo, yo puedo decir: “He llevado el coche al mecánico y el tío (el mecánico) me ha cabreado porque me ha dicho que el coche es muy viejo”.
Si, por el contrario, usamos la forma reflexiva (cabrearse) estamos enfatizando que somos nosotros los que nos enfadamos. La causa de nuestro enfado es interior, es algo dentro de nosotros mismos. Por ejemplo, “no voy al fútbol porque me cabreo mucho cuando mi equipo pierde”. En este caso, la responsabilidad, la causa de mi enfado no es el partido de fútbol, el hecho de que mi equipo pierda, sino yo mismo. Soy yo mismo el que me enfado, me cabreo.
También existe “cabreo” que quiere decir “enfado”. Por ejemplo, alguien puede decir: ”Hoy tengo un cabreo!” o también “hoy es mejor no hablar con el jefe… tiene un cabreo muy fuerte…”, es decir, está muy enfadado.
Alucinar (alucine, alucinante)
En el lenguaje coloquial se usa a menudo “alucinar” en el sentido de sorprenderse mucho, asombrarse por algo.
Por ejemplo, se puede decir “estoy alucinando con tu padre. Juega muy bien al fútbol. Parece profesional”
Existe también “alucine” y “alucinante”.
Si algo nos sorprende mucho, podemos decir “es alucinante”. Por ejemplo, ante una situación que no nos esperábamos podemos exclamar: “¡Esto es alucinante!” o de una película podríamos decir “¡Es una película alucinante!”.
También existe “alucine”, que tiene un significado similar: “¡Qué alucine!” por ejemplo, es una expresión que podemos exclamar cuando ocurre algo inesperado que nos sorprende mucho.